Tengo una cuenta pendiente con la ciudad de Murcia en este blog. Y es que hay que ver lo bien que me han tratado siempre que he ido y sobre todo lo bien que he comido y todo lo que he aprendido. Y es que llegue desde la más absoluta ignorancia de su cocina típica y sobre todo de su aficion por el cañeo. Pero vamos, que no había que ser muy listo para darse cuenta de que la mezcla de una meteorología privilegiada, una huerta que no es necesario ni calificar y buena gente (empezando por mi familia política, ahí dejo la cuña) hacen que sea un sitio en el que sabes q no te va a faltar cachondeo y buenos alimentos.

En esta entrada os voy a hablar del restaurante al que intento pasarme a tomar aunque sea una caña siempre que voy a Murcia: El Rincón de Pepe. Bueno realmente voy a la barra, que sin ningún problema puedo asegurar que es de las mejores que conozco, y lo mejor es dejarse aconsejar.

Para empezar tu cerveza y tus almendricas. Que estas en Murcia. Y si vas sobrado, que te la pongan con parmesano. Sinceramente creo que se come más parmesano en Murcia que en toda Italia.

De entre las cosas ricas que suelen tener a diario es el pulpo asado al horno. Se despachan buenos pulpos estos murcianos porque los tentáculos son del doble de tamaño del que acostumbro a ver. Al pobre octopus lo mantiene en su caldo, con lo que consiguen que este jugoso a más no poder.

De ahí a otro entrante bueno son las berenjenas a la crema con gambas. Unas berenjenas con su buena bechamel bien gratinada y por supuesto, con gambas. Están buenas pero si está pegando el calor fuera, a lo mejor no es de lo que más te apetece. En ese caso puedes pedir un poco de hueva de mujol y mojama. Al ser sequillo y quedarse la hueva entre los dientes… bebes más cerveza. O también son muy recomendables las croquetas. Buenas de sabor y de calibre.

Con el ansia calmada, yo ya empezaría a pensar en el principal. Si vais al mediodía habrán hecho un caldero de arroz, un arrocito a banda o cualquier tipo de arroz. Sea cual sea, sería de mala educación no tomarse por lo menos un plato. Si por el contrario vas por la noche o el arroz ya se ha acabado es el momento de pedirse, para mí, una de las especialidades: El Atún de Ijada! Imprescindible. La primera que lo probé estaba con mis padres y nos encantó a los tres. Siempre que me llama mi madre y le digo que estoy, voy o he ido al Rincón de Pepe… se acuerda de la ijada de atún. La ijada es una de las partes más sabrosas del atún, esa que cuando vas a la pescadería parece que se les ha colado una pieza de carne. Os pongo una en la foto. En este restaurante la ponen a la plancha y con buena sal gorda.

Aunque no venga mucho al caso os dejo una foto que he encontrado buscando información. Eso sobre el despiece del atún, sobre el que podéis encontrar más detalle en este blog que hace referencia a un despiece que se realizó en la pescadería Señor Martín.

Siguiendo con la comida, que me voy por las ramas, hay un plato que no he probado y que la verdad es que tengo muchas ganas. Es el gallo pedro frito. Y es que es de esos pescados feos de verdad, pero que deben de estar bien buenos. Otra de las cosas que sí que he probado es la carne roja a la plancha. Muy buena, bien roja por dentro y cojonuda. Y como colofón final está genial. Y después copa. Claro está.