El nuevo restaurante del cocinero Joaquín Felipe es la joya de la corona del Isabela Gourmet Market (Paseo de la habana 5). Con este nuevo restaurante y la zona de copas habilitada en la planta baja la oferta que presenta Isabela Market es muy variada y satisface todos los gustos.
Actualmente, puedes disfrutar de puestos con productos de caza, cocina peruana y japonesa, puestos de jamón y hamburguesas. Además también puedes degustar la premiada tortilla de Senen. Pero si lo que buscas mas que un picoteo es una comida o cena mas formal, la opción del restaurante de Joaquín Felipe es todo un lujo.
Desde que abrieron he podido ir un par de veces. Gracias a su ubicación cerca de la zona de Azca, y a que tiene un menú de mediodía a precio asequible, es una muy buena opción para darte un pequeño homenaje a mediodía y desconectar del curro.
El restaurante tiene una estética elegante. Formal pero sin ser muy clásico. Y lo que destaca por encima de todo es la cocina. Visible desde cualquier lugar del restaurante. Las mesas son amplias y el espacio entre las mismas es suficiente.
Respecto a la carta, es bastante extensa. Los entrantes son medias raciones por lo que se puede pedir más de uno sin problema. Aquí podéis consultar la carta, donde los platos son una mezcla de cocina internacional y utilizando de las materias primas con denominación de origen (pesca de almadraba, ternera de Wagyu, Black Angus…).
De aperitivo, nos sirvieron unos boquerones en vinagre muy buenos. El servicio de pan es muy bueno y te ponen tu buen aceite de arbequina buenísimo.
Uno de los entrantes que más me ha gustado ha sido el tartar de atún con soja y wasabi. Muy bueno. Me gustó bastante más que el ceviche de pez mantequilla y la ensaladilla con atún de almadraba.
Como podéis ver en la carta, tiene también cuatro platos de cuchara. Nosotros probamos la sopa de ajo, con miso y huevo de perdiz y os recomiendo encarecidamente que la pidáis. Muy buena. Generosa de jamón y muy suave de sabor. Eso sí, si la pedís para compartir hay que tener confianza con el que vayas porque es un única cazuela y dos cucharas. Más que por los escrúpulos es porque habrá gresca por el jamón!!
De platos principales, a cada cual que pedimos mejor. El solomillo de angus negro es un corte de lujo. Vacuno de primera calidad. Tierno y sabroso. Esto le gusta a todo el mundo.
Y que decir de los callos de Wagyu. Realmente buenos. Un guiso estupendo como la sopa de ajo. Que vayan comprando cucharas de repuesto porque con unos guisos así se les van a desgastar muy rápido. Los callos no están en carta, pero durante el mes de noviembre los puedes degustar ya que este restaurante está incluido en el mes de los callos de establecimientos madrileños.
Respecto a la carta de vinos, muy variada y a precios razonables. Tomamos un Bancal del Bosch muy bueno.
Los postres también tienen su toque original ya que muchos de ellos los sirven en tarteras individuales. Pedimos el de pasión de guaraná. Estaba muy bueno, pero yo seguía pensando en los callos.
Conclusión, un restaurante en el que nos van a ver muy a menudo. Cocina que mezcla nacionalidades y elaboraciones tradicionales con su toque de innovación al utilizar otras materias primas. Le relación calidad precio me pareció realmente buena.
Recomendado tanto para comidas con amigos o en familia. Pero sobre todo con amigos para empezar picando algo y acabar tomando una copa y sacarle todo el partido al Isabel Gourmet Market.
A veces este sito es «normal» y a veces es horrible. No merece la pena jugar. No volvermeos después de una comida cara y decepionante. Nunca vayas sin descuento. mala relación precio/calidad.