Le Pain Quotidien es uno de mis sitios favoritos para desayunar por todo el mundo. Lo descubrí hace unos años en París cuando iba allí de vez en cuando por trabajo, y casi siempre que podíamos íbamos allí a desayunar para tomar fuerzas antes de la reunión. Pensaba que era de allí, pero luego descubrí que era belga (y de hecho se fundó mucho antes, en 1990). Posteriormente he estado también varias veces en uno que hay en Londres cerca de St Paul’s, y recientemente, con la apertura de uno muy cerca de mi casa en Madrid, decidimos ir un día a desayunar en plan brunch. En Madrid lleva ya cerca de dos años funcionando, sobre todo por el centro, aunque poco a poco van apareciendo más por otros barrios.
Le Pain Quotidien es principalmente una panadería y pastelería que trata de volver a los orígenes, a las cosas bien hechas, con ingredientes de verdad. Casi todos los alimentos que usan o venden son lo que llamamos hoy en día orgánicos, ecológicos y sanos, combinado además con el mayor esmero en la elaboración por lo que todo está muy rico. Además los locales son característicamente muy acogedores, con mucha madera, muy abiertos y luminosos y siempre con una o varias mesas corridas donde sentarte a desayunar, muchas veces compartiéndola con gente que no conoces.
Su especialidad, como digo, es el pan. Lo tienen blanco, negro, y con todo tipo de cereales. Lo puedes pedir para llevar o para comer allí. También la pastelería es una delicia: cruasanes, napolitanas (pain-au-chocolat), scones, pastelillos, de la máxima calidad. La pastelería debo decir que la que ofrecen en España no es tan buena ni tan variada como la que he probado en Francia o Inglaterra, lo que por otro lado es normal. Además de esto puedes tomar un café orgánico muy rico, zumos naturales, infusiones propias, huevos orgánicos, fruta fresca del día, y para comer o la hora del brunch, algunos platos más suculentos pero igualmente sanos como ensaladas, quiches o tortillas.
También está genial del sitio que hace de almacenillo, y puedes comprar todo para llevar: aceite, sal, mermeladas, compotas, tés, la propia vajilla…
Para mí uno de los imprescindibles de Le Pain es la Cesta del Pan (6€). Es una cesta de varias rebanadas de panes variados, pensada para dos personas. Debo advertir que el pan nunca lo tuestan en este sitio, pero realmente no hace falta, por lo bueno que está. Mi favoritos son el pan blanco chapata y la flauta, con cereales y pasas. Otra de las gracias del restaurante son las mermeladas, que están distribuidas por las mesas y tienes que ir buscando cuál coger. Son todas tremendamente buenas, así que yo normalmente pruebo todas las que pillo (fresa, frambuesa, 4 frutos rojos, ruibarbo, albaricoque, naranja, ciruela, etc). También hay distribuidas cremas de cacao tipo nocilla/nutella, de tres tipos: negra, blanca y parda. Probadlas y volveréis a vuestra infancia. Una pasada.

También me encanta el café con leche de Le Pain, servido un un tazón enorme si asas, te recordará a Heidi seguro. El otro día desayunando pedimos a medias una cesta, como veis, sendos cafés y Carmen pidió un scone de avena (2,5€) con queso fresco batido. El scone está bastante mejor el de Londres, pero también estaba rico.

Yo pedí también unos huevos Benedict (8,3€), que ellos llaman benedictinos en España. Es la forma en la que más me gusta tomarlos, y siempre que voy a Londres o Nueva York lo hago, pero aquí en Madrid los podéis tomar muy buenos en varios sitios. En este caso estaban muy buenos, con la salsa holandesa riquísima, aunque el punto de los huevos no estaba logrado 100%. Un poco demasiado hechos.
En conclusión, es un sitio genial para desayunar y empezar el día con buen pie. Yo lo recomiendo para cualquier mañana tonta de fin de semana que tengáis, lo agradeceréis, y si veis alguno por el extranjero, con más razón. Haréis turismo con el estómago alegre. También quiero decir que me llevé una pequeña decepción en el Le Pain Quotidien de Madrid, porque aunque sigue siendo un sitio especial, no llega a la altura de los otros que había visitado. El servicio fue lento y desordenado; los baños pequeños y sin el encanto que tienen en otras ciudades, hay escasez de mermeladas en las mesas… No sé; nada de eso quita que sea uno de mis sitios favoritos para desayunar, pero creo que tienen que mejorar.
Web y twitter: lepainquotidien.es – @le_pain_q_es
Precio: 11€
Siempre he tenido curiosidad por este sitio, pero casi todo el mundo con el que he hablado dice que los precios son algo altos para lo que sirven. Habrá que asomarse a ver si es verdad 😉
Sí, bueno, sin duda es carito, pero no lo puedes comparar con un desayuno de 2,5€ de cafetería. He puesto algunos precios en el artículo para más detalle. La cesta del pan, que da para 2 o 3 vale 6€, por ejemplo.
Desayunamos en Enero en el que está en Velazquez. Nos trataron, sin cortesía alguna. Cuando me sirvieron mi tazón de leche y café, al tomarlo me encuentro la tapa de un brik de leche. Cuando me quejé educadamente, ví como las camareras se reían. En Madrid…les falta mucha clase. Lamentable….
Es una pena. Yo también salí desencantado del de Cuzco por el servicio, cuando en otros países es encantador. Espero que no se carguen la franquicia en España por no mantener el estándar de servicio.